El sector agropecuario enfrenta un año extremadamente complejo. La campaña empezó con una seca desde la siembra y nunca llegó la recarga destacada. Bajo este marco, las estimaciones de cosecha siguen bajando y, como si fuera poco, el mercado se ve impactado por la incertidumbre política.

Expectativa por el precio de la soja

Dante Romano, gerente de cuentas claves de fyo, comentó que el mercado todavía no tomó dimensión del impacto de la sequía y las heladas tempranas, por lo que podría haber subas. Lo que sucede también es que "el mercado está enfocado en la realidad de Brasil, con una cosecha que se pone en ritmo, por lo que ofrecen mucha soja al mercado internacional".

De igual manera, considera que "seguramente vamos a ver un precio (de la soja) que se va a tener que acomodar más arriba".

La segunda parte es la decisión política: "En soja lo que todos estamos tratando de entender es si vamos a tener o no un dólar soja". Romano explica que el primer dólar soja era por la emergencia, pero que el segundo se vio como una herramienta para incentivar el ingreso de divisas y la recaudación, con retenciones: "Estamos todos viendo que el dólar soja le convendría al Gobierno, y del lado de los compradores le permitió adquirir buenos volúmenes a un precio atractivo, por lo que también para los exportadores sería interesante". En tanto, para el productor que perdió un 40% en promedio, teniendo un dólar soja permitiría compensar un equilibrio en la situación económica. 

Bajo este marco, "lo más lógico es que salga en un momento de cosecha", comenta Dante, pero aclara: "Lamentablemente es una decisión política que poco tiene que ver con la lógica de los mercados". "Del lado de la producción, lo que escuchamos es que si no hay un dólar soja no se va a vender", advierte.

Dante Romano recomienda no comprometer entrega física hasta tener pisos productivos. "Si hay necesidades financieras cubrirlas con maíz de la campaña vieja o con el maíz temprano, y aprovechar el dólar soja, que podría generar exceso de liquidez y postergar las ventas de maíz".

Pero no hay que perder de vista que "el mercado sigue funcionando". "Estados Unidos podría duplicar sus stocks de maíz y es bajista de largo plazo". "Lo que se recomienda es tomar operaciones de venta sobre diciembre, que no exige entregar la mercadería en corto plazo, y con herramientas de mercado a término tener la posibilidad de desarmar esos negocios para venderle al consumo que tengamos más cerca", agrega.