25/06/2025

“Revolución silenciosa”: la receta de Brasil para transformar su agricultura frente al cambio climático

Con tecnologías, el vecino país apunta a una articulación entre ciencia, políticas públicas y el sector privado. LA NACION - 24/06/2025
 

SAN PABLO, BRASIL.-“Estamos viviendo una revolución silenciosa”. Con esa frase, Alessandro Cruvinel, director del Ministerio de Agricultura de Brasil, sintetizó el proceso de transformación que impulsa el país desde el sector agropecuario. La expresión resume una estrategia que busca enfrentar el cambio climático a partir de la articulación entre ciencia, políticas públicas y el sector privado.

En un contexto global marcado por la creciente presión ambiental y nuevas exigencias comerciales, referentes del ámbito público, privado y científico debatieron sobre el rol de la agricultura como parte de la solución. Durante la sesión inaugural del panel “Construyendo resiliencia climática a través de la agricultura sostenible”, en el World Agri-Tech South América, se destacaron herramientas clave como los bioinsumos, la digitalización del agro y la investigación genética aplicada a cultivos más resilientes. LA NACION participó de este evento en un viaje organizado por BASF.

“Ya existen tecnologías disponibles, pero necesitamos una estrategia”, advirtió. Como ejemplo citó el programa de biocombustibles y propuso replicar ese modelo en otras cadenas productivas. Entre las políticas que ya están en marcha mencionó “Agro Brasil + Sustentable”, una plataforma gratuita para que los productores puedan demostrar prácticas sostenibles ante mercados que exigen trazabilidad y certificación libre de deforestación. También destacó Mapa Conecta, una red digital y territorial que vincula inversores, universidades, empresas, gobiernos subnacionales y startups en torno a la innovación agrícola.

Desde Embrapa, la empresa pública de investigación agropecuaria, su directora ejecutiva, Ana Euler, explicó que la tecnología de fijación biológica de nitrógeno —un tipo de bioinsumo— ya se aplica en más de 46 millones de hectáreas de soja y maíz. Esta innovación permitió a los productores brasileños ahorrar 24.800 millones de reales (unos 4700 millones de dólares) y evitar la emisión de 78 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente.

Silvia Dávila, presidenta para América Latina de Danone; Alessandro Cruvinel, director de la Secretaría de Innovación, Desarrollo Sostenible, Riego y Cooperación del Ministerio de Agricultura de Brasil, y Ana Euler, directora Ejecutiva de Innovación, Negocios y Transferencia de Tecnología de Embrapa
Silvia Dávila, presidenta para América Latina de Danone; Alessandro Cruvinel, director de la Secretaría de Innovación, Desarrollo Sostenible, Riego y Cooperación del Ministerio de Agricultura de Brasil, y Ana Euler, directora Ejecutiva de Innovación, Negocios y Transferencia de Tecnología de Embrapa

“Estamos guiando la investigación hacia nuevas especies, más allá de las leguminosas, como los pastos, que son fundamentales para la producción de leche y carne”, señaló Euler. Agregó que Embrapa tiene más de 10.000 tecnologías listas para ser transferidas y cuenta con 43 unidades de investigación en todo el país, algunas con alcance nacional y otras con foco territorial.

La ejecutiva destacó, además, el trabajo en genómica aplicada para desarrollar cultivos más adaptados al cambio climático, y anticipó el lanzamiento de seis nuevos bioinsumos este año, en alianza con el sector público. También remarcó el impulso a la digitalización del agro y el trabajo con pequeños y medianos productores, que representan dos tercios de los establecimientos rurales en Brasil.

“Hoy, una de las principales barreras para escalar nuestras tecnologías es la falta de asistencia técnica”, reconoció Euler. Por eso, uno de los focos actuales de la entidad es la transformación e inclusión digital, con herramientas de trazabilidad, comercio electrónico y agricultura de precisión.

Situación

Otro ejemplo que mencionó fue una experiencia en zonas semiáridas, donde se desarrolló un sistema de gestión eficiente del agua que luego se convirtió en política pública. Ya fue adoptado por más de 1000 familias rurales y les permitió mantener su actividad productiva en contextos de sequía.

Embrapa tiene más de 10.000 tecnologías listas para ser transferidas y cuenta con 43 unidades de investigación en todo el país, algunas con alcance nacional y otras con foco territorial

Desde el sector privado, Silvia Dávila, presidenta de Danone para América Latina, puso el foco en la urgencia de actuar en forma coordinada. “La agricultura lo cambia todo”, sostuvo y agregó: “Si se hace bien, puede ser parte fundamental de la solución a los desafíos climáticos y sociales que enfrentamos”.

Dávila advirtió que los sistemas alimentarios están bajo presión y que no hay más tiempo para discusiones aisladas. “La única forma de avanzar es construir un ecosistema fuerte que incluya a gobiernos, empresas, productores y consumidores, con reglas claras, incentivos correctos y compromiso ambiental”, expresó.

También remarcó que la sostenibilidad no es una opción, sino una necesidad, especialmente en el uso del agua y la energía. “Necesitamos innovar, pero también necesitamos claridad regulatoria y acceso al financiamiento”, dijo. En ese sentido valoró el rol de las políticas públicas como habilitadoras de la acción privada. “Cuando hay visión a largo plazo y estabilidad, las empresas pueden invertir e innovar”, añadió.

“La combinación de tecnología, legislación y compromiso es la base para un futuro mejor”, resumió Dávila. Mencionó que en toda la cadena alimentaria hay oportunidades para reducir emisiones, mejorar la eficiencia y generar empleo de calidad, siempre que se trabaje de forma articulada.

 

Por Pilar Vazquez