AGROVERDAD

El analista de mercados Enrique Erize sólo encontró datos que dejan alguna expectativa de mejora acotada de los precios de los granos en una eventualidad climática que pudiera afectar en algo la evolución de los cultivos en Estados Unidos o un crecimiento de la demanda que, por esa misma tendencia a la baja, creciera y permitiera sostenerlos. "Mucho cuidado, información y a esperar", fue su síntesis. 

El cierre de la Jornada Soja con Sustentabilidad estuvo a cargo del Licenciado Enrique Erize, de la consultora Nóvitas, que disertó sobre Perspectivas del Mercado de la Soja y Apuntes sobre el Mercado del Maíz: comenzó advirtiendo que la situación de este año está más complicada que la de 2012.

El rigor de la realidad de los precios
Señaló que la política cambiaria en Brasil es una mala noticia para la Argentina, pues el vecino país devaluó el real a 2.30. "Y eso no beneficia a Argentina", opinó. Además, en Estados Unidos estiman una cosecha de 93 millones y si esto termina cumpliéndose se planteará un escenario de recuperación del stock y mayor caída de los precios.

Dejó abierta una muy reducida posibilidad a que se produzca algún contratiempo climático durante agosto en EE.UU., lo cual entonces podría ejercer alguna cierta influencia en el comportamiento de las cotizaciones.

Procuró encontrar otros signos que permitieran alimentar optimismo para los próximos mes: "Está claro que el mundo quiere soja, quiere proteínas. Hasta ahora los sudamericanos pudimos acompañar el crecimiento de la demanda aumentando los rindes, sin aumentar el área, pero ahora tenemos que seguir creciendo en rindes y áreas. Y eso no es fácil con la soja a 400 dólares".

"Hay que esperar, quedan dos o tres semanas clave en el país del norte, si no pasa nada vamos camino a precios más complicados. La gran esperanza es que haya una devaluación. Con lo cual, mucho cuidado, información y a esperar", fue, en síntesis, su idea del mercado que viene.

La cosecha de maíz según Erize
En diálogo con Agroverdad, Erize discrepó con la estimación de cosecha de maíz que ha dado el gobierno, de 32 millones de toneladas, ratificada ayer en la Jornada por el Subsecretario de Agricultura de la Nación, ingeniero Marcelo Yasky.

El analista de mercados interpretó que las autoridades llegan a esa cifra por el artilugio de considerar "cosecha" lo que el "consumo propio", sobre todo en establecimientos ganaderos y tamberos, para darle a la Presidente Cristina Fernández la oportunidad de hablar de una cosecha total de granos de 104 millones de toneladas.

Sostuvo que ese maíz de consumo propio nunca constituyó lo que operativamente es el "maíz comercial" y, por consiguiente, compartió los cálculos de 24/25 millones de toneladas trilladas que dan "las Bolsas y otras instituciones".

Tal como lo hiciera en junio, Erize volvió a manifestar que hacia octubre puede ocurrir con el maíz lo mismo que con el trigo, o sea, producirse un faltante, a raíz de los ROEs otorgados por el Secretario Guillermo Moreno.